No todo lo que escuchamos es música para nuestros oidos. Mantener un volumen moderado con nuestra música, evitar el bullicio de la calle y hasta disminuir el volumen cuando hablamos en grupo o por teléfono, ayuda a que mantengamos bajos niveles de estrés además de proteger nuestros oidos. No grites, habla moderamente y escucha con tranquilidad.